Una de las mayores lesiones que deben atender los médicos traumatólogos cada día son los esguinces de tobillo. Es una lesión muy común, ya que se trata de un problema de ligamentos el cual puede causarse fácilmente mientras realizamos cualquier actividad física.
Los esguinces de tobillo es una de las afecciones más típicas que sufren los deportistas. Es que, como decíamos anteriormente, tan solo con ir corriendo y torcer el pie o realizar algún mal movimiento, los ligamentos laterales del pie llegan a torcerse y se produce el esguince.
Muchas veces no se trata de nada grave, pero en cambio hay otros casos donde, por no atenderse a tiempo o ser un golpe más fuerte, otras estructuras del pie se ven afectadas por esta torcedura. Es por este motivo que se recomienda acudir urgentemente al médico traumatólogo, para que éste pueda evaluar el nivel de gravedad.
Tengamos en cuenta que, si sufriste un esguince de tobillo, no podrás persistir demasiado tiempo, ya que el dolor y la incomodidad son constantes y ésto hará que necesites de un médico urgente. Además tampoco podrás apoyar firmemente el pie, por lo que la pierna se debilitará y no podrás caminar.
El esguince de tobillo puede ser más grave que ésto aun, llegando a causar una lesión completa del pie o fracturando el hueso. Todo esto requiere de un tratamiento para así poder comenzar rápidamente con la rehabilitación de manera que todo el pie pueda ser restaurado correctamente.
Diagnóstico y tratamiento
Después que el médico haya presentado el diagnóstico (esguince de grado 1, 2 o 3), se necesitará comenzar con la rehabilitación del esguince de tobillo para poder recuperar la movilidad del pie. Para este tratamiento de fisioterapia se necesitará contar con bastones o muletas de forma que el tobillo no lleve todo el peso del cuerpo, sino las lesiones pueden empeorar. Según el nivel de lesión, necesitarás de un bastón de apoyo parcial o completo.
Medicamentos y ejercicios simples
La primer parte de la rehabilitación esta destinada a bajar la inflamación del tobillo y poder restaurar los músculos afectados. Es por eso que se necesita vendar el pie con un vendaje elastizado para poder conseguir resultados más rápidos. Además, es muy común que deba permanecer recostado y con el pie levantado por encima del corazón para que así la inflamación se reduzca. Otra buena técnica para poder bajar la inflamación es colocar hielo y agua helada en la zona del tobillo, esto además disminuye bastante el dolor.
Cuando la inflamación vaya disminuyendo puede comenzar realizar movimientos simples. Uno de los ejercicios más comunes, es realizar movimientos simulando escribir las letras del alfabeto. Es recomendable realizarlo cada algunas horas, 3 veces al día.
Rehabilitación y sesiones de fisioterapia
A la segunda etapa de la rehabilitación se puede acceder ya cuando el pie está en estado de poder soportar el peso del cuerpo. La fisioterapia espera que después de comenzar a mover el tobillo, puedas recuperar todo su movimiento normal en el transcurso de 3 días como máximo. Para ésto se debe seguir una serie de ejercicios que pueden llegar a recuperar el estado de los ligamentos para lo cual se requiere que el paciente camine sobre una superficie ligera y variable.
Las clínicas de rehabilitación disponen de todos los elementos necesarios para poder llevar a cabo estos ejercicios de la mejor manera y así conseguir óptimos resultados. Cada día se irán incorporando nuevos movimientos y más complejos para poder ir devolviendo la particularidad y la fuerza al tobillo, como por ejemplo estiramientos con una o dos bandas elásticas, flexiones de pie, levantar los dedos, estiramiento del talón, entre otros.
Los tratamientos de rehabilitación de esguinces se ven acompañados de la suministración de analgésicos y antiinflamatorios de modo que el dolor no sea tan fuerte. Igualmente, después de la rehabilitación se necesitará pasar algún tiempo para poder recuperar la totalidad de la fuerza y así estar listo para regresar a las actividades físicas diarias.
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